Comida finca de caza

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Restaurante cabaña de caza

Mi padre y mi tío, como todos los miembros de nuestro clan, eran Lepraioli antes que cualquier otra cosa, así que en plena temporada había poco que bromear: tres veces por semana el equipo estaba operativo y ¡ay de quien no se presentara sin justificación adecuada! Les importaba un bledo mis kermesses amorosas nocturnas, no había santos en el cielo, sobre todo para mí que era y soy un hijo del arte.

Los alrededores se caracterizaban por numerosos granturces aún en pie, intercalados con prados de hierba verde heno. Unas cuantas alamedas deshilachaban el cielo gris de la mañana; si hubiera aparecido el sol, habrían dado sombra a las orillas de las acequias de regadío que las dividían de algún rastrojo de trigo cosechado en junio. Por último, unos terrenos baldíos cerraban la zona de caza antes de llegar a las orillas del Naviglio di Bereguardo. En general, muy buena tierra.

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Me quedé atónito, casi en suspenso sin darme cuenta.  Lo que me despertó fue la llegada de los perros, y también empecé a prestar atención a los gritos de Franco y Peppino que corrían hacia mí, gritándome que les quitara el “Zorro” de los dientes a los perros.

Los precios del pabellón de caza

Sin embargo, a lo largo de los siglos, el hombre ha convertido a su mejor amigo y compañero en omnívoro, a menudo con un uso excesivo de cereales: ¡pensemos en la alimentación de los perros de compañía con croquetas baratas!

La grasa de pollo, caracterizada por un mayor contenido en ácidos grasos poliinsaturados que la de vacuno o porcino, se utiliza normalmente en la alimentación animal. También es especialmente apetecible para los animales.

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La ventaja de utilizar alimentos de alta energía para perros es que proporcionan a nuestra mascota las necesidades energéticas adecuadas sin un aumento cuantitativo de las raciones diarias ni el uso de complementos alimenticios.

También se cree que el tipo de grasa tiene cierta influencia en el rendimiento cinegético, por ejemplo modificando las funciones olfativas, que mejoran al aumentar la cantidad de ácidos grasos insaturados.

Reserva del pabellón de caza

Cien hectáreas de hermosos robledales rodean Torre Colombaia, antaño coto de caza y ahora zona de repoblación de faisanes, liebres, ánades reales y alondras, objeto de “observación de aves” desde casetas de avistamiento junto a un estanque.

Entorno Kousminiana, incluida la crema Budwig. También están atentos a las intolerancias alimentarias (incluida la celiaquía). La Cucina di Giuditta también dirige un centro gastronómico con el mismo nombre, muy centrado en la salud, en Via Trebisonda 75R (mismo móvil). Horario: de 8.30 a 15.30 h.

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La casa del cazador

Podrá transformar cada trufa en un plato magistral gracias a la experta guía de los chefs toscanos. Le guiarán paso a paso en la cocina, mientras experimenta nuevos sabores y degusta una copa del mejor Chianti. Rodeado de las verdes colinas y bosques de Arezzo, mimado por los maestros buscadores de trufas, custodios de secretos centenarios transmitidos de padres a hijos.

Una experiencia única para divertirse al aire libre y en la cocina, experimentar y volver a casa convertidos en auténticos cazadores de trufas. Una experiencia para recordar, gracias también a todos los productos que podrá llevarse a casa, para revivir esta loca jornada toscana en su cocina.

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